Chile tiene uno de los códigos y regulaciones de construcción más estrictos del mundo en lo que respecta a la seguridad sísmica, esto debido a la incidencia de fenómenos sísmicos a lo largo de su historia. El gobierno de Chile ha implementado una serie de políticas y regulaciones para garantizar que los edificios se construyan para resistir terremotos y otros desastres naturales.
La construcción antisísmica de edificios está regulada por la Norma Chilena NCh 433 Of.96, "Diseño Sismo Resistente de Edificios", que establece los requisitos y estándares de construcción para garantizar la seguridad estructural de los edificios durante un terremoto. Esta norma se actualiza periódicamente para incorporar nuevos conocimientos y tecnologías.
La norma establece los requisitos para el diseño sismo resistente de edificios en cuanto a la resistencia y rigidez de la estructura, la distribución de cargas y la capacidad de disipación de energía sísmica. También establece los requisitos para los materiales de construcción, la calidad de la mano de obra y la inspección y control de calidad durante la construcción.
Además, la ley de urbanismo y construcciones de Chile establece los requisitos para los permisos de construcción y las inspecciones para garantizar el cumplimiento de la norma de diseño sísmico.
El cumplimiento de la norma es obligatorio para todos los edificios nuevos y para las modificaciones y remodelaciones de edificios existentes. La ley también establece requisitos para los permisos de construcción y las inspecciones para garantizar el cumplimiento de la norma de diseño sísmico.
Estas son algunas de las políticas y regulaciones más importantes relacionadas con la seguridad sísmica en Chile:
Leyes de zonificación: el gobierno chileno también ha implementado leyes de zonificación que regulan dónde se pueden construir edificios, teniendo en cuenta factores como el tipo de suelo y el riesgo sísmico. Esto ayuda a asegurar que los edificios no se construyan en áreas que son particularmente vulnerables a los terremotos.
Inspección y cumplimiento: El gobierno chileno tiene un sistema riguroso para inspeccionar edificios durante y después de la construcción para garantizar que cumplan con los estándares de seguridad sísmica establecidos en los códigos de construcción. Los edificios que no cumplan con estos estándares pueden estar sujetos a multas u otras sanciones.
Educación y divulgación: El gobierno chileno también pone un fuerte énfasis en educar al público sobre la seguridad sísmica y alentar a los constructores y propietarios de viviendas a adoptar las mejores prácticas para la construcción resistente a terremotos.
Investigación y desarrollo: finalmente, el gobierno de Chile invierte mucho en investigación y desarrollo relacionados con la ingeniería sísmica y la seguridad sísmica. Esta investigación ayuda a informar las actualizaciones de los códigos de construcción y otras políticas relacionadas con la seguridad sísmica.
En general, la política de construcción en Chile se enfoca en asegurar que los edificios se construyan para resistir terremotos y otros desastres naturales, y que el público sea educado sobre seguridad sísmica. Estas normas han convertido a Chile en un líder en ingeniería sísmica y ha contribuido a la tasa relativamente baja de muertes y lesiones relacionadas con terremotos en el país.
Penas severas para constructores y propietarios
En Chile, los constructores de edificios pueden ser penalizados si se determina que sus edificios no cumplieron con los requisitos de seguridad sísmica y colapsaron durante un terremoto o evento sísmico. La responsabilidad por el colapso del edificio y las consecuencias asociadas se determina mediante una investigación realizada por el Ministerio Público.
Por ejemplo, en 2010, un terremoto de magnitud 8.8 en Chile causó el colapso de un edificio de 15 pisos en la ciudad de Concepción, provocando la muerte de 17 personas. Luego de una investigación, se determinó que el edificio no cumplía con los requisitos de seguridad sísmica, y los constructores y propietarios del edificio enfrentaron cargos criminales.
En otro caso, en 2016, un edificio de 22 pisos en la ciudad de Santiago colapsó durante un terremoto de magnitud 6.9, aunque no hubo víctimas fatales. Luego de una investigación, se determinó que el edificio no cumplía con los requisitos de seguridad sísmica, y se impuso una multa a los constructores y propietarios del edificio.
En resumen, en Chile no hay impunidad para constructores de edificios si se determina que sus edificios no cumplen con los requisitos de seguridad sísmica y colapsan durante un terremoto o evento sísmico, lo que puede incluir cargos criminales y multas. Es importante para los constructores y propietarios de edificios cumplir con los requisitos de seguridad sísmica para garantizar la seguridad de los residentes y ocupantes del edificio.