Por qué los virus de la gripe y el Covid-19 no atacaron a nuestro organismo al mismo tiempo
El mayor miedo de todos fue infectarse al mismo tiempo del virus de la influenza y el Covid-19 provocando el colapso de nuestro sistema inmunol
La comunidad científica internacional, y la población en general, temieron durante la pandemia de Coronavirus que al mismo tiempo que el virus Covid-19 atacaba nuestro organismo la gripe común, que fue hace 100 años mortal para los humanos, no se combinaran y provocaran síntomas más severos y agravantes que hiciera aumentar en número de muertos.
En el mundo le llamaron: Flurona (flu, gripe en inglés y rona, contracción del coronavirus) cuando una persona contraía al mismo tiempo el virus de la influenza y del coronavirus (Covid-19). Ambas son dos infecciones distintas, y en muy pocas ocasiones un enfermo presento ambas infecciones al mismo tiempo. Ahora sabemos por qué no nos contagiamos, ni enfermamos con ambos virus al mismo tiempo.
En un principio se creyó que, gracias al uso generalizado de las mascarillas, al distanciamiento social y el haber extremado la limpieza dentro de nuestros hogares, medios laborales y lugares públicos se fue eliminando el virus de la influenza en el medio ambiente.
Sin embargo hoy se considera que fue la exposición al coronavirus, un virus nuevo en el barrio, lo que pudo poner las defensas inmunitarias del cuerpo en alerta máxima, impidiendo que otros intrusos accedan a las vías respiratorias. Este fenómeno biológico, llamado interferencia viral, puede limitar la cantidad de virus respiratorios que circulan en una región en un momento dado.
“Mi intuición, y mi sensación basada en nuestra investigación reciente, es que la interferencia viral es real”, dijo la Dra. Ellen Foxman, inmunóloga de la Escuela de Medicina de Yale. “No creo que vayamos a ver el pico de la gripe y el coronavirus al mismo tiempo”.
A nivel individual, dijo, puede haber algunas personas que terminen infectadas con dos o incluso tres virus al mismo tiempo. Pero a nivel de población, según esta teoría, un virus tiende a superar a los demás.
Aun así, advirtió, "el sistema de atención médica puede sobrecargarse mucho antes de que se alcance el límite superior de circulación, como lo ha demostrado la onda Omicron". La doctora Foxman dio estas declaraciones al New York Times.
Las tasas de mortalidad por influenza en los EE. UU. varían de una temporada a otra. La enfermedad viral causó aproximadamente 24,000 muertes y 400,000 hospitalizaciones en 2019-2020. Se estima que la temporada más severa de lo que va del siglo fue la del periodo 2017-2018, mató a 52,000 personas y hospitalizó a 710,000.
A pesar de que, por la irrupción del coronavirus a principios de 2020, bajo el número de personas que se vacunaron contra la influenza, los casos se mantuvieron inusualmente bajos durante la temporada de influenza 2020-2021.
Solo el 0.2 por ciento de las muestras que se tomaron entre septiembre 2020 a mayo 2021 dieron positivo por influenza, en comparación con alrededor del 30 por ciento en temporadas recientes, y las hospitalizaciones por influenza fueron las más bajas registradas desde que la agencia comenzó a recopilar estos datos en el presente siglo.
Estudios recientes han demostrado que las coinfecciones de gripe y coronavirus son raras, y las personas con una infección de influenza activa tenían casi un 60 por ciento menos de probabilidades de dar positivo por coronavirus.